Como hemos cambiado!

Hace una década estábamos aislados del mundo. Aislados realmente.

Eramos una patria desgarrada, sin memoria, que se hundía en la miseria del individualismo y la perra hijaputez de nuestros gobernantes que se peleaban para tomarse una foto con el Bush de turno sólo para tener esa foto.

Nuestros vecinos, en la misma idiotez. Como zombies miraban hacia el norte, babeando por una imagen. Tenían los mismos problemas de miseria, exclusión, desindutrialización y desgarro interno.

Pero sepa uno por qué "milagro", un día todo eso cambió. Quienes eran "ajenos" pasaron a ser propios, quienes eran modelos se convirtieron en repudiados y todo comenzó a cambiar realmente.

Comenzamos a preguntarnos e interesarnos por nuestros vecinos. Qué les pasaba, quienes eran sus gobernantes y quienes eramos sus pueblos. De a poco el uno y lo otro se convirtieron en lo mismo. Chavez con su pueblo, Nestor con el suyo, Lula con los brasileños olvidados por siglos, Lagos en Chile, Rafael Correa y sus forajidos que pasaron a ser pueblo; más tarde Evo con sus millones de Tupac Katari y los Uruguayos con su Frente Amplio.

De a poco, pero se avanzó mucho. Las oligarquías vivieron ese mismo camino de redescubrimiento y unificación. Hay que decirlo también.

Desde los monopolios mediáticos y oligarcas venezolanos que tumbaron por tres días a Chavez y masacraron a su pueblo en las calles, o esa misma oligarquía Cruceña y Pandina en Bolivia que masacraron campesinos.

El monopolio agro-mediático Argentino que para cubrir su origen ligado a los más feroces crímenes de lesahumanidad ha decidido mentirle a la población y llevar a sus diputados adictos hasta el ridículo. Lo mismo ha pasado en Ecuador; donde los medios centrados en la costa de Guayaquil han conformado el polo opositor contra un presidente que tiene una adhesión de 80% de su pueblo.

Pero nosotros estamos aquí. Apoyando este modelo de integración de los pueblos de América latina. Porque somos lo mismo, nos entendemos y no nos podrán separar más nunca.

Es un proceso histórico que se ha desatado y que solo puede profundizarse en democracia, integrando a más y más hermanos con justicia social y libertad.

Por eso, cuando se escuchen los resultados de la victoria Bolivariana, voy a estar contento. No porque sea un chavista. Sino porque soy un argentino con muy buena leche. Y se que si ellos están mejor; todo el continente estará mejor también.

NO PASARAN!, DE ESTE CAMINO DE UNIDAD NO HAY VUELTA ATRAS!

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