Autor: Lic. Mauro Burraco (**)
La semana pasada escribí una columna en la que describía la situación interna del peronismo. El partido está en pleno proceso de re-organización para afrontar la interna y normalizar su situación institucional.
Por raro que parezca, el radicalismo tiene una crisis similar y el regreso de Roberto Lavagna a las filas peronistas puso blanco sobre negro las ideas dentro del hormiguero radical.
En Azul, los radicales “autenticos” apoyaron la candidatura de Lavagna-Morales a la presidencia y el intento del hijo del ex-presidente Raúl Alfonsín para alcanzar la gobernación provincial. Para disputar la intendencia presentaron una lista propia. Lindor Burgos enfrentó al intendente Duclós que aspiraba a conducir al radicalismo local como intendente de la Coalición Cívica de Carrió.
(Carrió "trabajando" desde su cama).
La campaña de la UCR era alentada por referentes del partido local como Burgos, Schiaffino y Yannibelli. Este último, se erigía como uno de los más sanguíneos defensores de la “lista 3” y la disciplina partidaria. Pero después de que las urnas hablaron, recibió un ofrecimiento del gobernador Scioli para ocupar una Dirección dependiente de la subsecretaría de relaciones institucionales de la Jefatura de gabinete provincial. Como respuesta, los duclosistas lo tildaron de “desertor oportunista” en un comunicado publicado la semana pasada.
El duclosismo planea reunirse en el comité radical esta semana. No olvidemos que después del acto de transfuguismo, las autoridades provinciales intervinieron el comité y le “cerraron” las puertas a todos aquellos que decidieron irse con Stolbizer y – la cada vez más bronceada – Elisa Carrió (en la foto, "trabajando" desde su cama).
En el comunicado, los “radicales en la Coalición Cívica” dicen que pretenden “reconstruir el radicalismo” logrando modificar las autoridades que – siempre según el comunicado – “se han degradado y dejado de representar a los afiliados para convertirse en un órgano manejado por un grupo que no titubea en tomar actitudes autoritarias y excluyentes…”.
El objetivo de estos radicales es que el radicalismo vuelva a ser “lo que era” antes de que se fueran por la puerta o “por la ventana”, dicen los radicales.
¿A que radicalismo se referirán?. ¿Al radicalismo revolucionario que tomaba las armas para terminar con el fraude de los conservadores?, ¿al radicalismo popular de Yrigoyen?, ¿al radicalismo de FORJA que se unió al peronismo?, ¿al radicalismo del Juicio a las juntas? o a los “otros” radicalismos que no son tan ponderables.
En estos momentos de la re-organización partidaria, los radicales deberán recordar las consignas de Alem (foto) “que se rompa y no se doble”, porque si se doblan vivirán “inútiles, deprimidos y estériles. Y así, no vale la pena vivir”.
(*) Publicado en el semanario cacharienses "El pasquín Amarillo".
(**) El Autor es Licenciado en Ciencia Política de la UBA.
3 comentarios:
Que especie rara son los radicales que se fueron del la UCR de Azul.
O ese sentido del olfato ya ha detectado que Elisa Carrió se esta consumiendo en su propio caldo y pierde rapidamente el lejano segundo puesto que pudo logar en las últimas elecciones? Que pretende Duclos y Cia. volver al partido "etico y moral" que los cobijara durante tanto tiempo?
Y Burgos "arruga" y los recibe con los brazos abiertos?
Yo no pienso perderme los proximos capitulos de este "culebrón".
Hugo
En un dia como hoy, el 24 de febrero de 1946, el Coronel Perón derrotaba en los elecciones más limpias de la historia de la Argentina, a la decadente Unión Democrática compuesta por los radicales antipersonalistas, conservadores, socialistas, comunistas, demócratas progresistas, la Sociedad Rural, y todo "bicho que caminaba" de la mano de los ingleses.
Quiero adverirles que todo parecido que pudieran encontrar con la actualidad, es pura coincidencia.
Con respecto a la nota, opino que es breve, pero buena.
Adelante Jovenes Cacharienses.
Los radicales están como "perro en cancha de bocha", sin saber para que lado ir. Si dejan entrar a los que se fueron a la Coalición Cívica, se van a sentir usados como trapo de piso, y sino desaparecen.
Dificil elección no quisiera estar en sus zapatos. Me alegro de ser peronista hoy más que nunca
Publicar un comentario