miércoles, 12 de enero de 2011

Apología cristinista: El viaje de fin de semana








Cristina hoy te escuchaba presentar los números del turismo y sentía tu voz de emoción contenida porque estamos logrando de a poco que esta Argentina cambie a pasos agigantados.
Sentía que ÉL - desde algún lado - debe estar contento. Sabiendo que millones de chicos y chicas, de laburantes, de jubilados y jubiladas, de familias enteras pueden volver a disfrutar del merecido descanso.
Por eso, yo desde este humilde Blog voy a contarte una escapada y algunas cosas que pasaron este fin de semana.
Con un grupo de amigos (y colegas) armamos a las apuradas un escape a un turismo distinto que es el del Río Uruguay y las Termas de Villa Elisa.
Villa Elisa es un pueblo entrerriano que despúes de haber descubierto hace una década las aguas termales a más de 1000 metros de profundidad, la perspectiva de desarrollo de una industria diferente le cambio la cara.
Ese pueblo que había vivido mirando al cielo a ver si llovia porque dependían de la cosecha de cereales y luego debían estar más pendientes del precio de los granos para que la industria avícola pudo desarrollarse muchísimo y cambiar la mentalidad de todos sus habitantes.
Hoy todos tienen una muy cordial forma de tratar al "forastero". El turista es visto como alguien al que deben "tratar bien" porque les aporta ingresos en forma mucho más diversificada. Los dineros del turismo van desde la estación de servicio, los comercios, la gastronomía, los recuerdos, los paseos, etc. Es decir que se reparte en más manos.
El pueblo es limpio y en extremo respetuoso de las normas de tránsito. Así que da gusto.
Los negocios que están en la Avenida Principal (Urquiza) son más parecidos a los de una ciudad que a los de un pueblo porque el poder adquisitivo de la gente del lugar ha crecido y los han mejorado mucho.
Solo hay un banco y un cajero automático pero la gente no se desespera por sacar la plata. Esto es llamativo porque en Buenos Aires la gente hacía cola y aquí estaban todos tranquilos y abastecidos de dinero.
El complejo termal es muy importante, teniendo en cuenta el tamaño del pueblo. Piletas de aguas calientes y saladas, frías y dulces. Para todas las edades y controladas por técnicos y guardavidas.
El Spa, los bungalos (no se escribe así pero soy peronista) y los hoteles se encuentran rodeando las piletas y el parque arbolado le da un marco imponente.
El lugar está preparado para descansar, comerse un asadito con amigos o pasarla debajo del sol o los sauces.
El lugar tiene una costante afluencia de gente de todas las edades. Familias que vienen con sus chicos y mucha gente grande que se ve que pasa los viajes con sus amigos jubilados que vienen en contingente a "hervirse" en las termas. También hay mucha gente que solo pasa por ese día a divertirse y relajarse un rato.
A pocos kilómetros se encuentra Concepción del Uruguay. Pero para llegar hay que tomar una ruta que desemboca en la Ruta Nacional 14 que están transformando en autovía. La obra es imponente ya que hay movimiento de tierra, puentes y máquinas de asfaltado trabajando hasta los domingos.
En la ruta hay muchísimos camiones y los lugareños resaltan a cada momento que "es la ruta del Mercosur". Y si, es la ruta del Mercosur y ha dejado (o está dejando de ser) la "ruta de la muerte".
Concepción es una ciudad mucho más grande. Además de tener su atractivo histórico tiene un gran desarrollo natural y turístico.
Los balnearios e islas cercanas a la ciudad tienen unas hermosas playas de arenas blancas.
Si!, arenas blancas y aguas tranquilas de río. Esas aguas son el orgullo de los "uruguayenses" con fondo de arena que no son barrosas como las del Paraná.
Increibles lugares para meterse, nadar un poco y tomarse alguna bebida espirituosa, un mate de té o simplemente un mate.
Aqui la gente es un poco más "local", porque "la gurisada" se va a Colón que es como la Villa Gessel del litoral; así que Concepción es un ambiente muy familiar y tranquilo.
En fin querida Cristina. Esto no fue un viaje de vacaciones de esas que uno programa. Sino la posibilidad de irse unos días con amigos a unos pocos kilómetros y disfrutar del país. De nuestro país.
Por eso, quiero que sepas que lo disfrutamos y lo seguiremos disfrutando porque todo esto - también - es gracias a ÉL y a vos que estás al frente de la recuperación del país. Y como dijiste hoy, todos estamos poniendo nuestro pequeño granito de arena, para que todos estemos un poquito mejor cada día.

2 comentarios:

Sujeto dijo...

Estimado Compañero:
De estas cosas sencillas se nutre la vida; hay que valorar -como vos lo hacés- poder disfrutarlas. Y si estás escribiendo esto, no estás obsesionado con la guita, la posición social y tantas otras boludeces propias de una sociedad de competidores al pedo.
Aprovecho para saludarte, yo por lo pronto estoy a punto de irme de vacaciones con mi familia, y no dejo de reconocer que desde hace 7 años lo vengo haciendo ininterrumpidamente. Por algo será, ¿no?
Un Abrazo

Emi dijo...

Hay mucho amor en este comentario tuyo. Se agradece.
Un abrazo cumpa.