miércoles, 7 de julio de 2010

¿Y dónde está el testigo?


Hoy, en la página 6 de La Nación sale esta notita, perdida entre los titulares catástrofe sin el menor contenido de la "pelea" entre Timermann y Sigal.
Todo el argumento de las denuncias sobre coimas pagadas por "todos los empresarios" para exportar a Venezuela se cae. Y se cae, porque ante la denuncia que había investigado Mondino debió terminar firmando "conforme" porque esas acusaciones no pudieron probarse.
Es muy "sugestivo" que justo ahora, que lo van a citar a Mondino, no encuentran al denunciante "de identidad reservada" responsable de la "trama interna" de la operación mediática que tiene su "trama externa" en las denuncias de Sadous.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Che, esa identidad reservada no empezará con Mag y terminará con netto?